La golondrina chilena es una especie monotípica (no tiene subespecies), perteneciente al orden Passeriformes, y a la familia Hirundinidae.
Morfológicamente, resalta tonalidades azul metálicos en la parte dorsal de su cuerpo, y zonas negruzcas, principalmente, alrededor de sus ojos y en las terminaciones de sus alas; en la rabadilla, abdomen, cuello y pecho se diferencia una coloración blanquecina. Es de un tamaño pequeño, midiendo cerca de 13-14 cm. En vuelo, podemos observar su característica cola ahorquillada que nos hará más fácil su identificación.
Esta especie es migratoria de verano, nidifica en el centro-sur de Chile y llegado el invierno migra hacia Bolivia, Paraguay y el sudeste de Brasil. Normalmente, tiene dos posturas al año, entre septiembre y diciembre. La podemos ver anidar en techumbres de casa, agujeros de muros o bien en huecos de árboles, formando nidos hechos de plumas y fibras vegetales, generalmente, de difícil acceso. Su nidada es de 3-5 huevos, que son de color blanco y miden 14-19 mm.
Distribución
Región de Atacama y Tierra del Fuego, habitando, generalmente, lugares abiertos
asociados a cuerpos de agua.
Habitat
habita en parques, áreas urbanas y lugares abierto con acceso cercano a cursos de agua.
Alimentación
Se alimenta de insectos voladores, que caza en vuelo. Comúnmente, la podemos observar en parejas o en grupos.
Clasificación
Si bien su categoría de conservación, de acuerdo a la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN), es de Preocupación Menor (LC), no está exenta de amenazas; la destrucción y alteración de humedales o cursos de agua naturales, afecta la presencia de insectos voladores, lo que influye en que esta especie tenga menor disponibilidad de alimento. Por otro lado, también se han reportado ataques de predadores, lamentablemente, su pequeño tamaño la transforma en una presa fácil para gatos.
Ubicación en el Campus
Observada en potreros cercanos a las facultades de agronomía, ingeniería agrícola y medicina veterinaria. Además, se ha registrado en la zona del tranque
* Imagen y texto gentileza de Ignacio Ramírez y Javiera Salgado.
